La tarde-noche fue discurriendo amena, cargada de mensajes envueltos en música, en versos, y reflexiones por parte de los que tomaban por momentos el escenario para ubicarnos en puntos distantes, a veces en el espacio y otras en el tiempo. Arrancó el acto con dos rapsodas miembros de LiterNauta y luego los grupos folklóricos de Paraguay y Argentina nos han hecho vibrar con su música y su baile como es el caso de Mburukuja y Corazón Salamanquero. El grupo Che Paisano dio apertura al bloque musical con una zamba emblemática que al cantarla y al oírla no hay quien no se remonte a los lejanos y ubérrimos pagos, bajo el cielo azul surcado de blancas nubes que imitan la bandera que cobija al que olvida y al que quiere olvidar. Versos cautivantes, lastimeros pero con el toque nativo justo para cantarla aunque se disfrute del amor que nunca se fue. Estas y otras melodías han sido acompañadas con voces y palmas por todo el público. Seguidamente, una nutrida y variada selección de músicas, entre zambas, chacareras y estilos mixtos el grupo Che Paisano desplegó el abanico folklórico de un género que tiene mucho que ofrecer, al son de la guitarra, de bombo y tamboriles se mecían las letras de las canciones más arraigadas al querer del pueblo dentro y fuera de sus fronteras. Generosa miscelánea compartida con un público diverso entre los que no faltaron los propios, de Valencia y otros rincones de España y donde abundaron los de fuera: paraguayos, mexicanos, uruguayos, brasileños, cubanos y como no, argentinos que salpicaban de “bravos” y de “otra” el aire henchido de buena música. Che paisano con una presentación espléndida ha puesto el broche de oro y ha fortalecido los lazos de amistad de todos los presentes.
Un poema da apertura a la fiesta de la amistad
Francisco Rossi ha inaugurado la velada festiva recitando un poema que fuera premiado recientemente. La fiesta se llevó a cabo con motivo del Día de la Amistad que se celebra en distintas fechas dentro del mes de julio en toda Latinoamérica.
Machado y Serrat abrieron el camino musical de la velada
Roberto Vetere entonó una canción que popularizó Serrat, el que pone música al poema de Antonio Machado “Caminante no hay camino…” preciosa canción que resuena en las metes de generaciones.
“Caminante No Hay Camino”
La tejedora de Ñandutí, poema .
Carmen Carrasco , escritora, poeta y rapsoda, siempre amiga del guaraní y del folkóre con raíces guaraníes, ha interpretado una preciosa poesía y ha hecho participar a los asistentes al evento del Día de la Amistad pidiéndoles que la acompañen a recitar en voz alta uno de los versos.
Vibrante música y baile argentino alegran la fiesta
Con pañuelos haciendo círculos en el aire y faldas en gracioso vuelo inició el baile argentino, luego se unieron los zapateos de los “gauchos”, haciendo con sus pasos y atuendos, estupenda combinación que representaban la Argentina más profunda. Variados bailes han hecho las delicias de los asistentes a la fiesta de la Amistad que unía no solo banderas si no amor por la tierra que nunca se olvida y que contagia a los foráneos aunque no se la conozca. Han sabido los componentes del ballet Corazón Salamanquero, conducir por el camino de la fusión de culturas y de la “Indianidad sagrada”.
Graciosa y ocurrente lotera en la Fiesta de la Amistad
El punto de gracia y salero en la celebración del Día de la Amistad, lo ha puesto Carmen Carrasco, con el poema “La vendedora de lotería”. La rapsoda, convertida en la “lotera” que con marcado acento “andalú” iba relatando las peripecias de su oficio que le hacía encontrar en el camino todo tipo de personajes. El compañero constante era el hambre, que no la abandonaba y que le aguzaba el ingenio poético para rimar en todas las ocasiones, pero sin duda la gracia que le ponía Carmen al declamarlo ha hecho que este poema fuera un inolvidable momento de distensión y risas.
Toque especial con ritmo de polka
Mburukuja ha brillado más que nunca durante la fiesta de la Amistad, el colorido y vaporoso vestuario las asemejaba a aves que en vuelo grácil y único representaban al “pájaro campaña”, primera pieza musical que interpretaron. A si mismo han interpretado una deliciosa miscelánea de melodías y pasos. Como siempre el baile más aplaudido fue el de las botellas por la destreza y cuido extremo que requiere y que las chicas de Muburukuja la saben presentar con tanta gracia.
Zamba de mi Esperanza, una pieza infaltable del cancionero argentino
Esta canción conocida en todo el mundo y que de un modo u otro representa a la Argentina fuera de sus fronteras, ha sido la muy acertada decisión del grupo Che Paisano al incluirlo al repertorio que ofreció en la Fiesta de la Amistad. Una zamba que es bien querida y que dibuja a la perfección los contornos de su influencia en el alma y corazón de los argentinos de nacimiento o de elección. En este vídeo, los que no han podido asistir a la cita en Valencia, tienen la oportunidad de disfrutar del ritmo y la gracia encerrada en una canción.